DE MEMORIAS: LA NUEVA CIUDAD TRAS EL TERREMOTO DE 1861

Otra sección que formará parte de nuestro blog la ocuparemos para hablar sobre la historia y costumbres de nuestra provincia de Mendoza. Plasmaremos aquí aquellos sucesos relevantes que nos identifican o han colaborado para transformarnos en lo que hoy somos. Los invitamos a que compartan con nosotros "De Memorias", un paseo por el pasado.

"Todo está guardado en la memoria,
sueño de la vida y de la historia"
(León Gieco)

LA NUEVA CIUDAD TRAS EL TERREMOTO DE 1861

El cataclismo que asoló a Mendoza la tarde noche del 20 de marzo de 1861, tumbó dramáticamente un estilo de vida y un encuadre urbano colonial.

La misma noche del terremoto, el agua y el fuego más la acción del predador más cruel y despiadado: el hombre, terminaron la tenebrosa tarea de enterrar aquella aldea cuyana fundada en 1561.

En aquella turbulenta década del 60 del siglo XIX, los mendocinos refundaron la ciudad con tenacidad, con una tozudez heroica que venció a las limitaciones de la época y a la escasa ayuda del gobierno nacional, más preocupado en reprimir a los rescoldos del Partido Federal que en brindar apoyo financiero a la capital cuyana destruida. Sumado a ello, las epidemias emergentes propias de un desastre telúrico doblegaron a la población sobreviviente.

En un principio se proyectó construir la ciudad nueva en el actual Distrito de Las Tortugas del Dpto. de Godoy Cruz, atendiendo a la elevación del terreno y al microclima favorable para la vida humana; sin embargo la presión y las ambiciones de la elite terrateniente, impusieron la refundación alrededor de una plaza principal donde hoy ubica la Plaza Independencia. Allí se dispuso la construcción del centro neurálgico de la Nueva Ciudad. La nueva disposición fue proyectada por el agrimensor francés Julio Balloffet, basada en la disposición estratégica de cuatro plazas menores circundando a una plaza mayor (plazas San Martín, España, Chile e Italia).

También alrededor de la mítica Plaza Mayor o Independencia, se construyeron los principales edificios públicos: Casa de Gobierno, Cárcel y Legislatura, sin contar que los principales vecinos de ese lugar donde residía el poder eran, justamente, los terratenientes y viñateros más poderosos, tales como la familia Civit, cuya casa hoy alberga a la Junta de Estudios Históricos.

Lamentablemente la fotografía de los frentes de dichos edificios no es profusa. La vieja Casa de Gobierno se ubicaba al Sur de la Plaza, donde hoy funciona el edificio del Colegio Normal; la Cárcel en el actual establecimiento del Colegio Nacional Agustín Álvarez. El único edificio sobreviviente de esa época es la Legislatura provincial. El Departamento General de Irrigación tenía su sede en la esquina de calles 26 de Mayo y Gutiérrez. De esta construcción sobrevive un ala que ubica sobre calle 25 de Mayo, entre Gutiérrez y Espejo, actual edificio de la CGT regional Mendoza.

Fotografía gentileza de www.mendozaantigua.blogspot.com